Salud

Una investigación española muestra que una proteína inmunitaria del cerebro puede conseguir ralentizar el deterioro por alzhéimer

Madrid
SERVIMEDIA

Una investigación liderada por la doctora Estrella Morenas-Rodríguez, recientemente incorporada a la Unidad de Trastornos Cognitivos del Servicio de Neurología del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid, muestra la probable función protectora de la proteína TREM2 como ralentizadora de la Enfermedad de Alzheimer.

Este hallazgo puede convertirse en el origen de nuevas opciones terapéuticas capaces de potenciar esta proteína y aplicarla como tratamiento preventivo para retrasar el inicio de los primeros síntomas en personas con riesgo de padecer alzhéimer.

Según la literatura científica, la enfermedad comienza varias décadas antes de la aparición de los primeros síntomas cognitivos. Este estudio, 'Soluble TREM2 in CSF and its association with other biomarkers and cognition in autosomal-dominant Alzheimer's disease: a longitudinal observational study', publicado en la revista 'The Lancet Neurology', analizó qué sucedía durante esa fase temprana, antes de inicio de los síntomas, para saber cuándo tratar la enfermedad y con qué, y frenar la evolución.

En el estudio se monitorizaron a 155 voluntarios con mutación genética causante del alzhéimer y 93 familiares sanos, durante un periodo de entre 2 y 15 años. En todos ellos se midieron los niveles de la proteína TREM2 (un tipo de células inmunitarias del cerebro que se encarga del bienestar neuronal). Cuando la microglía detecta una anomalía, se activa de distintas maneras contra el virus, célula tumoral o microorganismo que la desencadena. En el caso del alzhéimer, se observó que esta proteína activa la microglía para hacer frente a la acumulación de dos proteínas relacionadas con la disfunción y muerte neuronal, ralentizando la progresión de esta enfermedad degenerativa.

Además, en esta investigación también se comprobó mediante resonancia magnética, que una mayor elevación de la proteína TREM2 durante una fase temprana de la enfermedad está asociada con una importante ralentización de la atrofia cerebral inherente a la enfermedad, así como de con una importante estabilización de la función cognitiva.

La doctora Estrella Morenas-Rodríguez destacó que el desarrollo de tratamientos dirigidos a potenciar las funciones de esta proteína puede suponer un gran avance terapéutico en la enfermedad de alzhéimer. Esta investigación fue llevada a cabo durante la etapa postdoctoral de la doctora Morenas-Rodríguez en el Laboratorio del Profesor Christian Haass, en el DZNE-Múnich, y liderada conjuntamente por ambos.

(SERVIMEDIA)
27 Jun 2022
MFR/gja