El decreto se implantará de forma gradual en dos cursos escolares, en primero de bachillerato el curso 2008-2009 y en segundo en el curso 2009-2010. Esta nueva ordenación viene determinada por la Ley Orgánica de Educación (LOE) que establece que el Gobierno central fije las enseñanzas mínimas y sea cada comunidad la que elabore el currículo que responda a los intereses, necesidades y rasgos específicos de la región.

Según el Gobierno de Castilla-La Mancha, la nueva normativa ha sido fruto de un amplio proceso de participación por parte de la comunidad educativa de la región, y, sobre todo, de las aportaciones del profesorado.

Además de la novedad relativa al sistema de repetición y promoción, de manera que sólo podrán pasar de curso quienes aprueben todo el curso o como mucho suspendan hasta dos materias, el decreto introduce otras dos novedades importantes.

Para aquellos alumnos que repitan con tres o cuatro materias, permite una mayor flexibilidad al dar la posibilidad de completar con asignaturas de segundo curso de bachillerato, como ocurre en la universidad o en formación profesional. El decreto recoge que sólo se obtendrá el título de bachiller si se superan todas las materias en un máximo de cuatro años.

Otra novedad importante es que el alumnado deberá escoger entre tres modalidades diferentes: artes; ciencia y tecnología, y humanidades y ciencias sociales. El bachillerato de artes tendrá dos vías: artes plásticas, imagen y diseño, y artes escénicas, música y danza, ésta última es una nueva opción donde se contemplan aspectos relacionados con la historia, el análisis y la estética musical, así como el estudio del mundo audiovisual y los fundamentos biológicos del movimiento y la danza.

El bachillerato de ciencias y tecnología aúna el vigente bachillerato de ciencias de la naturaleza y de la salud con el bachillerato de tecnología, para ofrecer así una amplia variedad de contenidos para que el alumnado pueda orientar sus estudios por vías diferentes.

En lo que se refiere a las materias que se imparten en bachillerato, recogen por primera vez en un currículo oficial las particularidades de la región. Además, aparecen nuevas asignaturas comunes, como ciencias para el mundo contemporáneo o filosofía y ciudadanía.

Según los datos del Gobierno de Castilla-La Mancha, en el curso 2007-2008 estudiaron bachillerato en la región más de 28.000 alumnos.