ESPAÑA TIENE YA UN MERCADO LABORAL MAS FLEXIBLE QUE SUS SOCIOS DEL EURO, SEGUN LA BANCA DE INVERSION LEHMAN BROTHERS
-En lo que está por debajo es en I+D, resultados educativos y facilidades para crear empresas
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España tiene ya un mercado laboral más flexible que todos sus socis del euro, salvo Irlanda, pero se encuentra por debajo de ellos en políticas clave para impulsar el desarrollo a largo plazo, como el nivel educativo, las inversión en I+D y las facilidades para la creación de empresas.
Así se desprende del estudio "Más rápido, más alto, más fuerte. Una Comparación Internacional de Políticas Estructurales", realizado por el banco de inversión norteamericano Lehman Brothers para evaluar la situación de las 21 economías más desarrolladas del mundo.
El estudio, al ue tuvo acceso Servimedia, compara a esos paises en función de 400 indicadores agrupados en tres grandes áreas: el mercado laboral, del que depende el nivel de paro; las políticas de crecimiento, de las que dependen el ritmo de incremento del PIB; y la política de competencia y precios, de la que depende la inflación.
En términos globales, teniendo en cuenta los tres apartados (antes de las reformas aprobadas este año por el Gobierno de Aznar en reforma laboral y pensiones), España ocupaba el puesto dcimoséptimo entre los 21 paises más desarrollados, con 4,5 puntos en un baremo de cero a diez, empatada con Austria, y sólo por delante de Portugal, Italia y Grecia.
El primer puesto corresponde a Estados Unidos, que obtiene un 6,5, y también superan el aprobado Canadá (5,9), Nueva Zelanda (5,9), Reino Unido (5,8), Australia (5,4), Suecia (5,3), Suiza (5,2), Finlandia (5,1) y Holanda (5). Figuran igualmente por delante de nuestro país Dinamarca (4,8), Japón (4,8), Francia (4,7), Noruega (4,7), Alemani (4,6) y Bélgica (4,6).
España supera el nivel medio del área del euro en las políticas estructurales referidas al mercado laboral, (regulación de la huelga, indemnizaciones de despido, salario mínimo, prestaciones de desempleo, etcétera), capítulo en el que se sitúa como el noveno país más flexible entre las 21 economías desarrolladas y como segundo del área euro, sólo precedido por Irlanda.
Sin embargo, ocupa el puesto decimotercero en políticas de precios y competencia, y desciende hasta el peúltimo lugar, únicamente por delante de Grecia, en las políticas que aumentan el potencial de crecimiento a largo plazo.
Estas últimas miden el gasto dedicado a educación, la inversión tecnológica y el estímulo a la creación de empresas mediante una fiscalidad favorable, financiación barata y la eliminación de trabas burocráticas, entre otras cosas.
A este respecto, el informe señala que en España "los trámites para registrar empresas llevan más tiempo que en otros paises europeos", los costes fiancieros son más altos, y el sistema fiscal es más complicado, aunque matiza que "el gobierno está introduciendo reformas para ayudar a las pequeñas compañías".
Añade que el porcentaje de alumnos que concluyen los niveles educativos más altos también está por debajo de la media y que "la producción y uso de tecnología es pequeño, y el esfuerzo en investigación y desarrollo está por debajo del área del euro. Las solicitudes de patentes son bajas, como también también lo es la cuota de empresas que intrducen nuevos productos".
Además, "el uso de Internet es más bajo que en muchos paises europeos y la proporción de analfabetos en el manejo de ordenadores es más alto", aunque hay un motivo de optimismo para que esto cambie en el hecho de que "los costes de Internet, que están entre los más baratos de Europa, sugieren un crecimiento más rápido de las tecnologías de la información en el futuro".
MERCADO DE TRABAJO
En el capítulo del mercado laboral, el informe considera que España está entre los aises con mayor flexibilidad salarial y con más bajas cotizaciones sociales para los empresarios, con sólo cinco paises con una política más favorable a las empresa en este terreno.
Sin embargo, apunta en sentido negativo la existencia de una "restrictiva" legislación de contratos a tiempo parcial y una aguda división entre empleados fijos y temporales, que hace que "alrededor de un tercio de los trabajadores estén atrapados en un ciclo de frecuentes transiciones entre empleos temporales o, peor todava, de empleos temporales al desempleo y de vuelta a los primeros".
En el terreno de la política de precios y competencia, Lehman Brothers constata el "rápido progreso" hacia la liberalización emprendido durante los dos últimos años en las telecomunicaciones, y que el sector eléctrico se ha liberalizado con mayor alcance y rapidez que en la mayoría de los paises del euro, "pero", puntualiza, "no hay competencia en la generación de electricidad".
Señala igualmente que los subsidios a la industria sguen siendo "generosos", a pesar de "algunas reducciones", y que los horarios de apertura comercial "siguen restringidos en algunas regiones".
HUMILDAD METODOLOGICA
En las consideraciones previas a las cifras y conclusiones del informe, los autores advierten de que ofrecen sus resultados "con un alto grado de humildad", ya que, según reconocen, pese a todos los esfuerzos de objetividad, la valoración sobre lo que constituye una "buena" o una "mala" política estructural está sujeta a distintas valoraiones.
A este respecto, aclaran que adoptan un criterio de lo estructuralmente "bueno" y "malo" coherente con el que manejan la Comisión Europea y la OCDE, de manera que "preferimos que los mercados de bienes estén libres de la intervención del estado y que los mercados laborales sean competitivos y descentralizados. Los impuestos deben ser bajos, así como los subsidios sociales: ambos distorsionan las decisiones de trabajar y producir".
Los mismos autores del informe (fechado el 15 de marzo del 001) reconocen que, si se da prioridad a la cohesión social por encima de otras consideraciones, los criterios sobre las buenas y malas políticas estructurales cambian, ya que, por ejemplo, "los paises con los mercados laborales más flexibles tienden a tener las mayores dispersiones de renta después de impuestos. En otras palabras, en estos paises, los impuestos y el sistema de ayudas sociales hacen poco para redistribuir la renta".
(SERVIMEDIA)
12 Abr 2001
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