ROCÍO JURADO

ESPAÑA PERDIÓ 1.159 MUNICIPIOS A LO LARGO DEL SIGLO XX

MADRID
SERVIMEDIA

El número de municipios españoles se ha reducido en 1.159 a lo largo del siglo XX, pasando de los 9.267 existentes en el año 1900 a 8.108 en 2001, según se desprende de un estudio realizado conjuntamente por la Fundación BBVA y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie).

En ese mismo periodo, según este informe, la densidad de población ha pasado de 37,2 a 80,7 habitantes por kilómetro cuadrado. Esta progresiva concentración de la población ha llevado a que el 40% de los españoles resida en tan sólo un 1% del territorio nacional.

El estudio, denominado "La localización de la población española sobre el territorio. Un siglo de cambios", y dirigido por los profesores de la Universidad de Valencia y del Ivie Matilde Mas y Francisco Goerlich, realiza un análisis detallado de los últimos 11 censos de población elaborados en España.

La principal aportación del estudio es la cuantificación de fenómenos que ya son conocidos por especialistas y percibidos por la sociedad, como son el despoblamiento de los pueblos más pequeños del interior, la concentración de la población en las grandes ciudades y su posterior abandono hacia núcleos urbanos próximos a los centros de actividad o la expansión hacia la urbanización del litoral.

También constata la profundización de las desigualdades en la distribución de la población española durante el siglo XX, un periodo en el que el número de habitantes se ha multiplicado por dos, pasando de 18.830.649 a 40.847.371 personas.

Así, 11 provincias registran en 2001 menos habitantes que en 1900. Entre las que más población han perdido destacan Teruel, Soria, que han perdido la mitad de sus habitantes, seguidas de Zamora, Lugo, Ávila, Cuenca, Huesca, Orense, Guadalajara, Palencia y Segovia. Por su parte, Burgos y Cáceres apenas han incrementado el número de habitantes.

El mayor crecimiento, por otra parte, lo han tenido las provincias de Madrid, Las Palmas y Barcelona. Entre Madrid y Barcelona reunían, en 2001, la cuarta parte de la población española. Tras ellas, Valencia y Sevilla consiguen que en 4 provincias se concentre más de un tercio de la población (34,7%).

El resultado de este proceso de cambio es, según el informe, que el 95,9% de la población total se concentra en la mitad del territorio nacional, mientras que la otra mitad alberga al 4,1% restante. Esta progresiva concentración ha llevado, además, a que el 40% de los españoles resida en tan sólo un 1% del territorio nacional.

PERSPECTIVA MUNICIPAL

Desde la perspectiva municipal, los municipios con mayor pérdida de población han sido La Unión, en Murcia, que ha reducido en un 48,9% sus habitantes en 2001 respecto a 1900, y Valdés y Tineo, en Asturias (44,5% y 46,06%, respectivamente). Las mayores ganancias las tienen Fuenlabrada y las Rozas, en Madrid, y Murcia.

Según indicaron los autores del informe durante el acto, la profundización en los desequilibrios no ha sido lineal, sino que se distinguen tres fases "muy bien diferenciadas".

La primera de ellas,que arranca desde principios de siglo, registra un crecimiento lento y sostenido de población; la segunda, en los años 60 y 70, acelera la tendencia e impulsa el crecimiento de las ciudades y, por último, a partir de ese momento, se produce una ralentización del proceso.

Así, apuntaron el "agotamiento" del modelo de urbanización y al "triunfo de las ciudades intermedias" que, según dijeron, se debe al fenómeno de la inmigración, que se dirige a las ciudades pero que, por el encarecimiento de la vivienda, se localizan en los entornos más próximos a los grandes núcleos. La despoblación y el envejecimiento de la población rural "ha frenado" también ese éxodo del campo a la ciudad.

"Esta nueva tendencia es una buena noticia porque, aunque será costoso desarrollar nuevas infraestructuras para conectar distintos territorios, estaremos evitando la presión sobre la demanda del suelo concentrada en determinados lugares", subrayó Matilde Mas.

(SERVIMEDIA)
01 Jun 2006
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