Tras recordar la reciente carta conjunta, también con Irlanda y Malta por el reconocimiento de Palestina, en su intervención junto al primer ministro de Eslovenia, Robert Golob, Sánchez puso en valor “el compromiso, la valentía y la coherencia que está mostrando el Gobierno de Eslovenia para encontrar una solución pacífica a un conflicto que nos remueve conciencias, como es la situación de catástrofe humanitaria que se está viviendo en la Franja de Gaza”.

El presidente español recordó que son más de 33.000 víctimas mortales las que han sido asesinadas y que dos millones de personas pasan “hambre, frío, miedo y sed”, “fundamentalmente” los niños y niñas, dentro de una “región que desgraciadamente” por lo visto “en las últimas horas se asoma al abismo por las decisiones equivocadas de unos pocos”.

Más allá de poner en valor las relaciones bilaterales con Eslovenia, Sánchez afirmó que ambos países van de la mano en este asunto “por humanidad, por respeto sin duda alguna al sistema multilateral, y porque recordamos los horrores de la guerra”. Además, ahondó en que la “principal misión” de ambos mandatarios “es velar por el bienestar de nuestros conciudadanos y de nuestros vecinos.

Por ello, añadió que Eslovenia y España han “convenido” que van a “continuar reivindicando un alto el fuego inmediato, el respeto al derecho internacional humanitario, el acceso a la ayuda humanitaria y también el dar una perspectiva de horizonte político que resuelva definitivamente este conflicto” con la “única solución” de los dos Estados como respuesta “viable para alcanzar una paz justa en la región”.

Así las cosas, Sánchez aseguró que junto con Eslovenia se apoyará el reconocimiento en Naciones Unidas como gesto “para facilitar la implementación” de la solución de los dos Estados y se reconocerá el palestino cuando las circunstancias permitan "ese impacto positivo en un proceso que nos tiene que llevar a ese alto el fuego y a una salida diplomática y política a esta crisis”.

“Confiamos en que hacerlo sirva para mandar un mensaje de esperanza a millones gazatíes que hoy están sufriendo las consecuencias de la guerra y para que otros países occidentales también lo hagan, para poner en marcha un proceso político entre iguales que desemboque en una paz justa y duradera para dos pueblos, el palestino y el israelí”, remachó.