Según el Ejecutivo europeo, España cumple las condiciones para recibir dicha financiación comunitaria, que se encuadra en las medidas de adaptación de las estructuras agrarias ante la reforma de la Política Agraria Común (PAC).

De acuerdo con las decisiones de la Comisión, España cumple los requisitos para recibir ayuda comunitaria respecto a varias medidas adoptadas, como son las ayudas a explotaciones que no cumplen los requisitos de elegibilidad, las indemnizaciones compensatorias complemenarias de 1997, las indemnizaciones compensatorias de base de 1998, la renta de referencia de 1998, las de doce comunidades autónomas y las inversiones en Baleares.

Las decisiones del Ejecutivo se refieren al Reglamento 950/97 del Consejo, que establece el régimen de ayudas a las estructuras agrarias cofinanciadas por la sección de Orientación del FEOGA.

Estas ayudas están destinas a equilibrar la producción y la capacidad del mercado, mejorar la eficacia de las explotaciones agrarias, mantener un comunidad agrícola capaz de sostener las zonas rurales y proteger tanto el medio ambiente como el espacio rural.

Además, este reglamento establece ayudas a las explotaciones agrarias cuyo titular ejerza su actividad principal en el sector agrícola y presente un plan de mejora de la explotación, cuando la renta por unidad de trabajo humano sea inferior a 1,2 veces la renta de referencia fijada por los Estados.

En concreto, las inversiones que recibirán financiación comunitaria serán las destinada a la reconversión de la producción, a la adaptación a normas de calidad, reducción de costes y ahorro de energía. También recibirán ayudas las inversiones relativas a la diversificación de actividades y a la mejora de las condiciones de vida y trabajo y de las condiciones de higiene y protección del medio ambiente.