Así lo indicó el responsable de la Seguridad Social en la clausura de la Asamblea anual del Instituto de la Empresa Familiar (IEF).

Escrivá indicó que las empresas españolas han demostrado una “enorme capacidad de competir” en la última década, pero esto no se ha producido por una “ventaja comparativa de costes salariales”, sino por su “innovación y emprendimiento”.

Según su opinión, el incremento de los costes laborales es “simplemente” una “contribución adicional” a la sostenibilidad del sistema de pensiones, aunque “limitada”, ya que el “mecanismo fundamental” del Gobierno es el retraso en la edad jubilación efectiva. “No hay ninguna medida más eficaz para la sostenibilidad del sistema de pensiones que la prolongación de la vida laboral”, indicó al respecto.

Escrivá criticó la jubilación anticipada porque “en España se ha instalado culturalmente” esta idea “con cierta rapidez”, cuando “es una forma de pasar los costes a la Seguridad Social”. Así, apuntó que el conjunto del esquema de jubilación anticipada es a veces “muy agresivo” y se trata de un cambio cultural que “tiene que producirse”.

Asimismo, indicó que España es el país de Europa con “una tasa de actividad más baja entre 55 y 75 años” y, por tanto, constituye una “anomalía”.

El ministro de Seguridad Social subrayó que la “tensión en el sistema de pensiones se producirá fundamentalmente a partir de la década de los 30”, por lo que el Estado debe “ahorrar un poquito para que entonces tengamos el colchón suficiente”.

Por otro lado, señaló que, “cuando uno mira los procesos más espectaculares de creación de valor, empleo e innovación que se han producido en el ámbito internacional y nacional, suele encontrarse con mucha frecuencia” empresas familiares. “La forma en la que se toman decisiones o se afronta el riesgo, por ejemplo, probablemente sean elementos que hacen que este tipo de historias de éxito sean más frecuentes”, agregó al respecto.