Así lo indicó Alamany en rueda de prensa desde la sede de ERC, donde señaló que, con las votaciones de la semana pasada en la Cámara Bajada, “vimos partidos que parecen olvidar para quién trabajan”, refiriéndose a Junts, ya que “votar contra la subida de las pensiones, tumbar los descuentos al transporte público es hacer más difícil el día a día de muchos catalanes”.

A su juicio, lo único que provocaron estas votaciones es que los catalanes, “además de tener un servicio de Rodalies lamentable ahora también lo tengan que pagar más caro”. En este sentido, Alamany dejó claro que ERC “sabe cuál es su trinchera y no dejará nunca tirada a la gente de Cataluña”.

Al mismo tiempo, denunció que han pasado cinco días desde que decayó el decreto y el Gobierno “continúa sin aprobar un decreto que recupere estás medidas”. Recordó que mañana se reúne el Consejo de Ministros, por lo que pidió al Gobierno “que recupere” este decreto, “que se ponga las pilas”.

Alamany afeó que “unos olvidan para quién trabajan”, refiriéndose a Junts, y “los otros”, en este caso el PSOE, “abusan de tacticismo”. Por tanto, solicitó al Ejecutivo que haga “lo que crea conveniente con tal de recuperar estos decretos por que tienen implicación en la mejora de cada día de los catalanes”.

Remarcó que “no es la primera vez que Junts vota en contra de medidas que son sociales”, sino que “estamos acostumbrados a ver unos posicionamientos que se parecen a posicionamientos fiscales y sociales con PP y Vox”, pero el de este decreto quizá “ha sido la posición más escandalosa o con más difusión sobre una política que tiene impacto en el día a día de los catalanes”.

Preguntada sobre si ERC está a favor de trocear el decreto, como piden el Partido Popular y Junts, dijo “que lo hagan como quieran, pero que se pongan las pilas, que se espabilen los unos y los otros, que se dejen de mirar de reojo entre partidos políticos y que miren a la cara al pueblo de Cataluña”.

En concreto, exigió al PSOE y a Junts que “expliquen por qué hoy, además de tener un servicio penoso de Rodalies”, los catalanes lo tienen “que pagar más caro por el puro tacticismo de dos partidos políticos que se miran de reojo y que miran cómo pueden desgastar mejor al adversario político”.