La especialidad de enfermería en salud mental existe en España desde 1998 y está desarrollada, de forma que cada año se convocan pruebas selectivas para acceder a ella y existen enfermeros especialistas en salud mental que se forman con un sistema de residencia de un año de duración.

Así lo puso hoy de manifiesto el Consejo General de Enfermería en un comunicado hecho público con motivo de la celebración del Día Mundial de la Salud Mental.

Sin embargo, explican los enfermeros, el título de especialista, en la práctica, sigue sin ser obligatorio para ejercer en este ámbito profesional, "lo que supone una falta de respeto para el paciente, que se ve privado de cuidados especializados; para el profesional, cuyo esfuerzo resulta en vano, y para todos los ciudadanos españoles, que con sus impuestos pagan este sistema formativo".

Y es que, argumenta el Consejo de Enfermería, hasta la fecha las comunidades autónomas, a la hora de establecer sus relaciones de puestos de trabajo no piden como requisito imprescindible para ejercer en una unidad de salud mental el contar con el título de enfermero especialista.

"Tan sólo Aragón, Cantabria y Galicia han creado en su relación de puestos de trabajo la categoría de enfermero especialista en salud mental", informan los enfermeros.

A juicio del presidente del Consejo General de Enfermería, Máximo González Jurado, "resulta totalmente incongruente, contradictorio y a la vez un despilfarro absurdo el hecho de que el sistema sanitario público esté formando especialistas para que luego ese importante esfuerzo de los profesionales y la inversión que conlleva no reviertan en el propio sistema".

Para González Jurado, no sólo es necesaria la especialización y el que ésta esté vinculada con el puesto de trabajo que desempeñan estos enfermeros, sino también contar con un mayor número de especialistas.

"Es una necesidad de la sociedad que no están colmando las administraciones sanitarias competentes, habida cuenta las 149 plazas de formación de enfermeros especialistas en salud mental que se han convocado para el próximo año para todo el territorio nacional, un número ridículo si tenemos en cuenta la verdadera incidencia social de las enfermedades mentales", concluye el presidente de los enfermeros españoles.