La CNMV ha actuado con rapidez y decisión, puesto que el expediente sobre los supuestos engaños de Endesa sobre la OPA a Fecsa y Sevillana se inició después del 18 de octubre. Por tanto, en tan sólo dos meses ha llegado a una primera conclusión.

No en vano, este caso fue el primero y más relevante con el que se tuvo que enfrentar Juan Fernández Armesto, presidente de la CNMV, a los pocos días de su nombramiento.

La confirmación de que la OPA se ibaa efectuar, después de que la compañía lo hubiera negado, dejó en una situación desairada a la Comisión y su presidente, que nada más llegar a su cargo pareció sorprendido por un engaño de grandes proporciones.

La investigación se extiende también a los casos de operaciones de compra-venta de acciones de estas tres compañías en bolsa entre los días 10 y 18 de octubre en los que existan indicios del posible uso de información privilegiada. Sobre este particular, la CNMV no se ha pronunciado aún.

Sn embargo, la decisión adoptada ayer pone de nuevo sobre el tapete las diferencias de criterios entre el actual Gobierno y el presidente de Endesa, nombrado por gobiernos socialistas, y la posible aceleración de su cese, que se había dilatado para más adelante, según decisión del propio Gobierno.