El presidente de la asociación, José Antonio Gimbernat, declaró hoy a Servimedia que, al igual que en ocasiones anteriores, Juan Pablo II "no se manifiesta públicamente contra la pena de muerte, a pesar de que así lo reclaman muchos sectores desde la propia Iglesia católica".

En su última encíclica, el Papa señala que "la medida y la calidad de la pena deben ser valoradas y decididas atentamente, sin que se deba llegar a la medida extrema de la eliminación del reo salvo en casos de absluta necesidad, es decir, cuando la defensa de la sociedad no sea posible de otro modo".

Para Gimbernat, estas palabras revelan "una perspectiva ética y penalmente anacrónica, que afortunadamente está superada. Sin embargo, no tiene que extrañar, porque la Iglesia católica nunca se ha expresado públicamente en contra de la pena de muerte".

"Aquellos que defienden la pena de muerte, aunque sea en casos excepcionales", agregó, "están en una posición menos evolucionada ética, jurídica y socialmente"