Almunia, candidato al Congreso por Madrid, expuso a varios cientos de personas en el centro de ancianos de Torrejón el programa del PSOE en cuanto a la tercera edad y les alertó de los peligros del programa del PP.

En cuanto al "estilo de hacer política" del PP, dijo que "a veces hay quien compara esta derecha con la de antes, que es verdad que no tiene quien la defienda en público, pero en parte son los mismos". "En parte son los msmos, pero en lo que no son lo mismo tampoco quiere decir que sea bueno", apostilló Almunia.

El dirigente socialista se refirió a la actitud de protesta del PP por el vídeo electoral del PSOE. "Si hubiésemos puesto a Ramallo en sus intervenciones parlamentarias diciendo que los sindicatos deberían estar 200 años sin abrir la boca o Alvarez Cascos insultando a Felipe González, eso hubiese sido todavía más destructivo", destacó Almunia.

El dirigente socialista señaló que José María Aznar no sabe bin cuáles son las razones de fondo para que los españoles le voten, ya que "la sociedad española no comparte sus ideas políticas ni el proyecto de su partido".

Para Almunia, el proyecto del PP "corresponde a la defensa de los intereses de una minoría y no a representar a los intereses generales".

En el tema de pensiones defendió la necesidad de mantener el poder adquisitivo de las pensiones y garantizar que haya dinero para pagarlas. En esta línea, criticó al PP porque "no sólo quieren hacer el neocio con la salud y no les importa poner en ridículo el sistema de pensiones", sino que, es más, "no busquéis en su programa una sola línea de los viajes de la tercera edad".

"Tenemos un problema con las pensiones y otro con la sanidad en cuanto al programa del PP", dijo Almunia, quien añadió que también el PP ofrece una guinda: "no les gusta que viajéis. A ellos les parece un lujo. Tienen tan poca sensibilidad que no se dan cuenta de que los mayores son también personas como los demás".

En otro partado de su intervención criticó la rebaja de las cotizaciones sociales que propone el PP y dijo que la derecha en este asunto hace caso a los empresarios y para favorecerles quiere reducir en cuatro puntos las cotizaciones sociales.