Solbes, que intervino ayer noche en unas jornadas de las cooperativas agrarias con los representantes de los principales partidos, reconoció que el endeudamiento ha crecid "muy rápidamente en los últimos años, en torno a un 5 por ciento, y en 1992 se ha disparado".

Sin embargo, y en contra de lo previsto en los programas electorales del PP, IU y CiU, el del Partido Socialista no contempla ninguna actuación nueva para solucionar este problema, ya que según Solbes, "el sector agrario no está más endeudado que otros del país".

El ministro estimó que son "suficientes" las actuales subvenciones a los créditos para la modernización de las explotaciones y los créditos decampaña con tipos bajos para la comercialización de determinadas producciones, aunque reconoció que "el problema del endeudamiento atrasado no tiene solución".

En cuanto a exenciones de determinados impuestos, el programa del PSOE sólo contempla reducciones en el de Patrimonio y Sucesiones para las explotaciones prioritarias en las que se mantenga la actividad, medida también recogida por el resto de partidos.

Sin embargo, los del PP y de IU coinciden en reducciones en el impuesto de la renta y e la Seguridad Social agraria, cuando además el Partido Popular propone un tratamiento diferenciado para el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y el Impuesto de Actividades Económicas (IAE).

Las nuevas promesas del PSOE son la petición ante Bruselas de que las superficies de barbecho puedan recibir ayudas, en concepto de una medida medioambiental, y que se establezca apoyo financiero comunitario ante catástrofes naturales, como forma de lucha contra la sequía.

Por lo demás, insiste en las líneas yaadoptadas: modernización de las explotaciones que las hagan más competitivas, con apoyos a las explotaciones familiares y los jóvenes agricultores; promover la organización del sector para que comercialice su propios productos y apoyar a las cooperativas; y mantener el acuerdo marco, como forma de relación con las organizaciones agrarias.

CONTRACRITICAS

Pedro Solbes basó parte de su exposición en rechazar las críticas a su actuación. Calificó de "coyuntural" la caída de renta de los agricultores en asi un 9 por ciento el año pasado, y aseguró que "no se puede decir que todo está perdido".

También rechazó el argumento del abandono de actividad, ya que aunque admitió que en los últimos 10 años han dejado la agricultura 715.000 personas, dijo que desde 1976 a 1982 la abandonaron 641.000 personas, y recordó que desde 1989 se han incorporado 160.000 nuevos agricultores.

En cuanto a las cantidades que España recibe de la CE, principal crítica del PP, dijo que nuestro país es beneficiario del 12,9por ciento del presupuesto comunitario para agricultura (600.000 millones de pesetas), y es el cuarto país productor, con el 12 por ciento de toda la CE. Por contra, Francia que produce el 22 por ciento de la producción, recibe ayudas comunitarias de un 16 por ciento del total dispuesto para la actividad agrícola.