"Nosotros los vascos somos capaces de gobernarnos a nosotros mismos en el marco europeo y lo hacemos mejor que los que gobiernan desde Madrid", prosiguió el líder vasco, al tiempo que aseguraba que habían sido pacientes, admitido las reglas del uego y respetado la Constitución española.

Por otro lado, Arzalluz criticó duramente la gestión del Gobierno y la "política de vitola" en materia económica, además de culpar a los socialistas de la crisis industrial y de la devaluación de la peseta. Por todo ello, pidió "juicio a los amnistradores del Estado.

Finalmente, y durante el mismo acto, el "lehendakari" vasco, José Antonio Ardanza, se defendió de las acusaciones afirmando que la Comunidad Autónoma del País Vasco no es insaciable ni insoldaria en sus revindicaciones.

"No revindicamos por revindicar. Sólo demandamos los instrumentos que nos corresponden legítimamente, porque queremos y sabemos hacerlo mejor", puntualizó Ardanza en un tono más moderado.