Un total de 33 buques de superficie y submarinos, así como unos 50 aviones y helicópteros con base en tierra y en los buques, participarán en "Tapón 96", el ejercicio aeronavl más importante que se desarrolla anualmente en el Estrecho.

A la edición de este año han sido invitados efectivos navales y aéreos de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Grecia, Holanda, Italia, Portugal, Reino Unido y Turquía.

Este ejercicio complementa cada año la puesta en práctica de los acuerdos de coordinación entre las autoridades militares de España y la OTAN y consiste en poner una fuerza aliada multinacional bajo control operativo español, para llevar a cabo un supuesto tácticoen la zona del Estrecho de Gibraltar y sus accesos.

Por parte de la Armada española participarán, entre otras fuerzas, el portaaviones "Príncipe de Asturias", las fragatas "Asturias", "Baleares", "Andalucía", "Extremadura", "Santa María", "Numancia" y "Navarra", el buque de apoyo logístico "Marqués de la Ensenada", las corbetas "Infanta Elena" y "Cazadora" y los submarinos "Delfín", "Narval" y "Galerna, además de otros buques.

El Ejército del Aire español interviene con aviones Mirage, Hércules, rion y Aviocar, además de numerosos efectivos humanos, y el de Tierra participa con el Mando de Artillería de Costa del Estrecho, el Batallón de Guerra Electrónica y helicópteros de reconocimiento.

El ejercicio tendrá dos fases, una de adiestramiento, que facilitará la integración de las unidades en dos fuerzas multinacionales, y otra táctica, en la que las fuerzas agrupadas en dos bancos actuarán con libertad para cumplir los cometidos asignados, dentro de las reglas de enfrentamiento previamente estblecidas.

La crisis en que se basa el ejercicio es fictica y tanto éste como las acciones tácticas que se desarrollan en la zona no guardan relación directa con situaciones o acontecimientos del contexto real de la actualidad.

Los objetivos de "Tapón 96" son, entre otros, mejorar el adiestramiento individual y colectivo de las unidades, efectuar operaciones navales en coordinación con el Mando de Defensa de Costa y el Mando de Defensa Aérea, practicar acciones tácticas en las condiciones de la zoa y poner en funcionamiento estructuras logísticas para apoyar una fuerza marítima multinacional, así como evaluar la disposición y efectividad de un despliegue para poner en vigor un embargo económico.