Se trata de uno de los proyectos de investigación practicados por los integrantes de la XI Campaña Antártica que se desarrolló entre el 2 de diciembre del año pasado y el 27 de febrero.

En la campaña participaron tanto miembros del Ejército de Tierra como personal civil, compuesto por sismólogos y meteorólogos del Instituto Geofísico de Andalucía y de la Universidad de xtremadura, según informa el boletín "Tierra", del Ejército español.

El proyecto previsto por el personal de transmisiones tenía como objetivo comprobar si era posible la comunicación diaria desde la Antártida con España a través de las antenas militares. Al final se consiguió mantener un enlace telefónico diario vía radio, e incluso instalar correo electrónico, también a través de este sistema.

En conclusión, durante la expedición se consiguió que las comunicaciones con España tuviera un coste smilar al de una llamada nacional. Gracias a esta experiencia piloto se dedujo que es prácticamente seguro el enlace desde cualquier parte del mundo con España.