Hasta octubre, Dulciora había cubierto sus expectativas de ventas, que han experimentado un crecimiento del 12,5 por ciento.En la actualidad, la empresa prepara la campaña de Navidad, que le supondrá unos ingresos de 450 millones, principalmente en peladillas, piñones y garrapiñadas.

La empresa de los hermanos Pérez González tiene una producción en su fábrica vallisoletana de unas 70 toneladas de dulces al día, de los que ahora la mayor parte son "de goma", con formas diversas que van cambiando según las preferencias el mercado.

Dulciora tiene firmado un contrato con el AVE (tren de alta velocidad) hasta 1994 para sumnistrarle esta clase de caramelos, ya que es la única empresa en España que los fabrica envueltos en plástico, y que las fuentes consultadas calificaron de "alto standing".

Asimismo, para ampliar su cuota del mercado (más del 30 por ciento actualmente), Dulciora compró el pasado mes de marzo el 70 por ciento del capital de Dulces Hispania, sociedad alicantina dedicada a los "dulces de esponja".