DROGA. APARICIO QUIERE REFORMAR EL ESTATUTO DE LOS TRABAJADORES PARA FACILITAR LA REINSERCION LABORAL DE DROGODEPENDIENTES

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Juan Carlos Aparicio, anunció hoy que está a dispuesto a impulsar la reforma del Estatuto de los Trabajadores para contribuir a la rinserción laboral de las personas con drogodependencia.

Aparicio, que compareció en el Congreso ante la Comisión Mixta para el estudio del problema de la droga, aseguró, al ser preguntado sobre este particular por la diputada de CiU Zoila Riera, que "la redacción del Estatuto de los Trabajadores es perfectible y debe ser impulsada".

El ministro explicó que la intención del Gobierno es efectuar una consulta a los agentes sociales para ver si existe una coincidencia en "el deseo de redacciones que aciliten, sobre todo, las políticas de inserción y de reinserción laboral de trabajadores que han tenido este tipo de problemas".

Según Aparicio, el objetivo de la reforma del Estatuto de los Trabajadores es evitar que se produzca la lectura a veces muy restrictiva que se realiza de las toxicomanías y que impide la reinserción laboral de quienes han tenido ese problema y están en una fase de rehabilitación. "La idea es facilitar los procesos de reinserción y rehabilitación", añadió.

Durante su coparecencia, el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales ofreció algunos datos sobre la actual situación de la drogodependencia en el ámbito laboral español, tomando como punto de referencia los estudios realizados por la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Según indicó, los sectores en los que los trabajadores tienen mayor riesgo de abusar del consumo de alcohol y de drogas son los de la alimentación, el transporte, el sector marítimo, la construcción, las cadenas de montaje, el personal militr y los trabajadores en actividades de recreo.

Las características laborales que potencian el consumo de estas sustancias son la tensión, la disponibilidad de drogas y alcohol en el lugar del trabajo y los períodos largos fuera del ambiente familiar.

El ministro señaló que, según la Cuarta Encuesta Nacional de Condiciones de Trabajo, un 3,1% de los empleados consume antidepresivos, tranquilizantes, estimulantes, relajantes o pastillas para dormir, porcentaje que fue significativamente más elevado en algunas ramas de actividad como servicios sociales (4,9%) o administración y banca (4,3%).

El consumo de estos psicofármacos fue de un 2,3% en aquellos trabajadores que no presentaban síntomas relacionados con el estrés, mientras que fue de un 20% entre quienes sí los presentaban.

Aparicio se refirió también a los estudios realizados por la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD), según los cuales se observa un mayor consumo de drogas ilegales entre los trabajadores en paro, destacand la disminución en el consumo de tabaco y alcohol y el incremento en el de psicofármacos. Entre las drogas ilegales, ha descendido el consumo de cannabis y heroína y ha aumentado el de cocaína y drogas de diseño.

Ante esta realidad, un 97,4% de los trabajadores propone la realización de actuaciones en las empresas para luchar contra el uso abusivo del alcohol y el consumo de drogas, entre las que destacan la información y formación de los empleados sobre este fenómeno y sus consecuencias y la orientacón hacia centros especializados de aquéllos que ya tengan problemas de este tipo.

Sin embargo, apuntó el ministro, sólo el 21% de los entrevistados manifiesta que en su empresa se ha realizado alguna actuación relacionada con la drogodependencia. No obstante, según el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo, entre las empresas de 250 o más trabajadores, el 49,7% ha realizado alguna acción de educación sanitaria en el tema del tabaquismo, un 39,8% sobre el consumo de alcohol y un 12,8% obre otras drogas.

(SERVIMEDIA)
19 Jun 2001
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