Robles, que compareció en el Congreso ante la Comisión Mixta para el Estudio del Problema de la Droga, recordó que la ley del 96 sobre medidas de control de sustancias químicas se basa en dos principios jurídicos fundamentales: el artículo 12 de la Convención de Naciones Unidas y el reglamento de la Comunidad Económica Europea.

Explicó que el tráfico de las sustancias catalogadas a sabiendas de que se van a utilizar para la fabricación ilícita de droga tóxicas está previsto como delito en el artículo 371 del Código Penal.

Robles indicó que en los últimos cuatro años se han desmantelado en España 40 laboratorios dedicados a la fabricación ilícita de drogas, 25 de los cuales son de los denominados coloquialmente "cocinas". En estos lugares se incautaron drogas sintetizadas y otras sustancias utilizadas en el proceso.

En cuanto a la cooperación internacional, el delegado para el Plan Nacional sobre Drogas dijo que España sigue participando muy acivamente en todos los programas de seguimiento, muy especialmente en el del permanganato potásico, también denominado "Operación Púrpura", y cuyo objetivo es el control de todos los envíos superiores a más de 100 kilos de esta sustancia, utilizada en la fabricación de cocaína.

Añadió que dicha operación ha proporcionado numerosos éxitos basados en el intercambio de la información en tiempo real como factor fundamental para detectar y prevenir el desvío de esa sustancia.

Robles explicó también queen enero de 2001 ha empezado la "Operación Topaz" para el control de los envíos internacionales de anhídrido acético, un precursor de la heroína, con diseño similar a la "Operación Púrpura".

De cara al futuro, indicó, el Gobierno está centrado en la consolidación del sistema de control, en el aumento de las inspecciones, en el tratamiento adecuado de la información que se obtiene en ellas y en garantizar que todo el entramado que España ha montado y está desarrollando da sus resultados y ayuda a contrlar uno de los aspectos fundamentales del tráfico de drogas.