Los nombramientos de los nuevos arzobispos y obispos es competencia exclusiva del Papa, a propuesta de la Nunciatura Apostólica en España.

De los arzobispos y obispos dimisionarios que permanecen todavía como titulars, sólo uno lleva casi un año con prórroga de jubilación. Se trata del cardenal Angel Suquía, que presentó oficialmente su jubilación el pasado 2 de octubre de 1992.

Esta prórroga le ha permitido al cardenal Suquía, sobre el que se dice que mantiene una buena sintonía con el Papa, oficiar de anfitrión en la consagración de la catedral de la Almudena celebrada por el Papa durante su última visita a España.

CANDIDATOS PARA MADRID

Según fuentes consultadas por Servimedia, parece que los nombramienos no se producirán hasta que se haya decidido el relevo en Madrid, que probablemente será después del verano.

Para Madrid se barajan varios nombres. El Episcopado español se inclina por que la archidiócesis madrileña la ocupe el actual presidente de la Conferencia Episcopal, Elías Yanes, actual arzobispo de Zaragoza, lo que le permitiría compaginar mejor ambos cargos.

Se trata de una fórmula aplicada con el cardenal Suquía, ya que cuando fue elegido presidente de la Conferencia Episcopal en 1987ya actuaba como arzobispo madrileño.

Sin embargo, también se barajan otros nombres, como el de Carlos Amigo, arzobispo de Sevilla; el obispo Francisco Alvarez, de Orihuela-Alicante, y José María Estepa, arzobispo castrense.

En la terna también figura el arzobispo de Barcelona, Ricard María Carles. El hecho de que recientemente hayan sido nombrados dos obispos auxiliares para su archidiócesis, que podrían condicionar de alguna forma al que le sustituyera, aumenta las dudas sobre su candidatura.

Otra de las archidiócesis de importancia es la de Toledo, regentada en la actualidad por el cardenal primado Marcelo González Martín, jubilado el pasado 16 de enero.

Para ocupar esta archidiócesis se especula con el actual arzobispo de Santiago de Compostela, Antonio María Rouco, y el arzobispo de Oviedo, Gabino Díaz Merchán.

Respecto al resto de la diócesis, ya está decidido que la de Huelva la ocupará el actual obispo auxiliar Ignacio Noguer, mientras la de Bilbao, cuyo titular, Luis María Larea, se jubiló el pasado mes de abril, ha originado un polémica que ha disgustado en el Vaticano.

En Bilbao, con el obispo dimisionario al frente, el Consejo Pastoral presentó al Vaticano una terna de candidatos, así como el perfil que consideran debe tener el sucesor. En definitiva, proponían que la elección no dependa exclusivamente de lo que proponga el nuncio de España, Mario Tagliaferri. Por su parte, otra diócesis vasca, la de Vitoria, queda vacante porque su obispo, José María Larrauri, se jubió el pasado mes de marzo.

También hay dos diócesis que han quedado libres porque sus anteriores titulares fueron trasladados de destino. Es el caso de la de Cádiz-Ceuta, ocupada anteriormente por Antonio Dorado, que ha pasado a la diócesis de Málaga, y la de Plasencia, administrada por el momento por el obispo de Coria-Cáceres.

El próximo año cumplirán 75 años los titulares de las diócesis de Segovia, Castellón y Salamanca.