Según la Seo, existen tramos de cauce en los que aún no han entrado las máquinas, como las graveras de Aznalcóllar y el puente de Sanlúcar la Mayor. Además, subraya que hay trechos en los que sólo se ha retirado el lodo de forma superficial, como en la parte del Caño Guadiamar.

El grupo ecologista advierte del peligro que supone a gran cantidad de lodos en el talud del cauce y en la llanura de la inundación. Asimismo, insiste en que falta por incluir las 1.600 hectáreas de Entremuros (zona del parque natural donde se embalsó agua contaminada para su posterior depuración), ya que, según la Seo, se encuentran llenas de lodos y sedimentos tóxicos.

"El problema de los materiales acopiados es grave, pues supone un incremento de partículas sueltas que se arrastrarán fácilmente con las lluvias. No se puede considerar una zona limpiade lodos hasta que no desaparezca de ésta el peligro de arrastre de fangos en una evuntal crecida", añade la nota de la Seo.