Los representantes de todos los grupos del consistorio, así como personalidades y autoridades, rindieron en el acto de la corporación municipal el último homenaje a don Juan de Borbón.

Maragall destacó la importancia de la personalidad del padre del Rey, obre todo durante la transición, así como las relaciones especiales que tuvo con Cataluña y Barcelona y el papel que jugó para conseguir la reconciliación de los ciudadanos.

El alcalde de Barcelona también recordó los actos de homenaje de la ciudad a don Juan de Borbón con motivo de la entrega de la Medalla de oro de la ciudad y, más tarde, al celebrarse los 50 años de la adopción del título de conde de Barcelona.

El portavoz de Convergència i Unió en el Ayuntamiento, Josep Maria Cullell, recordóel reconocimiento a Cataluña que implica históricamente el título de conde de Barcelona, mientras que Enric Lacalle, del Partido Popular, aseguró que don Juan siempre había pueto los intereses públicos delante de los privados.

Eulàlia Vintró, de Iniciativa per Catalunya, expresó su respeto personal y político por el fallecido, a quien consideró un demócrata convencido.

Tras los parlamentos, todos los invitados al acto, unas 500 personas, entre las cuales había 80 miembros de la nobleza catalana, uardaron un minuto de silencio en memoria del conde de Barcelona y el cuarteto de cuerda de solistas de la Orquestra Ciutat de Barcelona interpretó el "requiem" de Mozart.

Los representantes del Ayuntamiento de la ciudad realizaron, antes de acabar el acto, una ofrenda floral al pie del busto de don Juan de Borbón, en la Galería Gótica del consistorio.

Entre las personas invitadas al homenaje se encontraban el arzobispo de Barcelona, Ricard Maria Carles; la viuda del presidente de la Generalitat osep Tarradellas, Antònia Macià, y autoridades de todas las administraciones. La Generalitat ha organizado para el próximo lunes un funeral por el conde de Barcelona en la catedral de la capital catalana.