Los firmantes del documento son USO, CSI-CSIF, la Confederación de Trabajadores Independientes (CTI), la Confederación de Cuadros (CC), la Confederación Estatal de Sindcatos Médicos (CESM) y la Federación de Sindicatos Independientes de la Enseñanza (FSIE).

También lo suscriben el Sindicato de Enfermeriía (SATSE), el Sindicato de Auxiliares de Enfermería (SAE), el Colectivo Profesional de Policía Municipal (CPPM), la Asociación Profesional Libre e Independiente (APLI), la Federación de Trabajadores Independientes de Comercio (FETICO) y la Asociación Nacional de Profesores de Enseñanza (ANPE).

En el acto de presentación, el secretario general de USO, Manuel Zagurre, en nombre de la plataforma, dijo que las peores "perversiones" del proyecto de UGT y CCOO eran la celebración de elecciones sin cómputo de votos, sin proclamación de resultados y sin mecanismos independientes de control del escrutinio.

Además, aseguró que la reforma propuesta suprime los preavisos; crea una "perpetua tensión electoral", al establecer un período de voto de 15 meses; y legitima el fraude en las empresas de menos de 30 trabajadores, al proponer que las votaciones se celebren a mano lzada.

Todo ello llevaría, a juicio de Zaguirre, a "mantener situaciones de hegemonía, privilegio y dominio sobre los trabajadores" y a "exterminar" del mapa sindical cualquier otra opción "que no sea la suya".

PUNTOS IRRENUNCIABLES

La Plataforma por la Libertad Sindical considera que hay varios puntos irrenunciables que se deben incluir en un proyecto de reforma consensuado tras el diálogo entre todos los sindicatos.

Entre esos puntos, destacan el mantenimiento de los preavisos, la supervsión de los comicios por órganos de control independientes, y no votar a mano alzada en las pequeñas empresas, a las que Zaguirre calificó de "cancha histórica del fraude electoral".

Las primeras acciones de la plataforma se encaminarán a dialogar con UGT y CCOO para que acepten los puntos citados. "Si encontramos cerrazón en UGT y CCOO para ello -añadió Zaguirre- intentaremos disuadir al Ministerio de Trabajo para que no acepte el texto".

Zaguirre señaló que, si el Ministerio de Trabajo no les hce caso y promulga una norma como la que proponen los dos sindicatos mayoritarios, recabarán el apoyo de los grupos parlamentarios para la eventual presentación de un recurso de inconstitucionalidad.

El manifiesto suscrito por los doce sindicatos califica de "gravísima perversión antidemocrática" la propuesta de UGT y CCOO. Zaguirre añadió que es "ácido sulfúrico" contra las libertades democráticas en general.