El consejero, que presentó la la segunda fase de la campaña de prevención de accidentes de tráfico "No pierdas la cabeza"(iniciada en 1992), señaló que en la región madrileña también disminuyó en un 10% el número de víctimas de todas las edades en el año pasado, ebido a los accidentes de tráfico.

Según los datos aportados, en la CAM murieron en accidentes de tráfico, en 1991, 7.504 personas, de las que 2.699 tenían entre 16 y 24 años. En 1992, el número de víctimas, por las mismas causas, fue de 6.735 (2.364 menores).

Lissavetky mostró su "satisfacción" por los resultados obtenidos por la campaña "No pierdas la cabeza", lanzada el pasado año, que pretendía concienciar a los jóvenes sobre el riesgo que supone conducir cuando se ha ingerido alcohol en exceo.

En esta campaña, impulsada por la Dirección General de la Juventud de la CAM, el Consejo de la Juventud de la región, Cruz Roja y Dirección General de Tráfico, participaron además en 1992 23 municipios y contó con la colaboración de 200 voluntarios.

La presente edición de la campaña cuenta con la colaboración de más localidades de la región, 35 hasta la fecha, y están proyectadas nuevas actuaciones: el reparto de 50.000 tarjetas de alcoholemia, 50.000 trípticos informativos y algo más de 10.00 carteles.

La Dirección General de la Juventud ha editado también distintos materiales como parasoles, camisetas y pins, que serán repartidos en los lugares de máxima afluencia juvenil.

Además, a partir del mes de setiembre, comenzarán una serie de acciones en los centros educativos, tanto en los cursos de enseñanza primaria como secundaria, en los que se entiende que puede tener una mayor incidencia el consumo de alcohol.

Jaime Lissavetzky mostró, por último, un interés especial en que ese ipo de campañas tengan una masiva influencia en los más jóvenes, ya que uno de cada cuatro muertos en la CAM, por cualquire causa, lo es por efectos del alcohol.