Rajoy mantuvo una reunión a puerta cerrada en el Congreso con los miembros del Grupo Parlamentario Popular con motivo del inicio del nuevo periodo de sesiones, que arrancará el 1 de febrero con el debate sobre el "plan Ibarretxe".

Según informaron a Servimedia fuentes asistentes, varios de los diputados que intervinieron aseguraron que el Partido Popular debe transmitir con claridad a los ciudadanos que la propuesta del pacto partió de Mariano Rajoy y que el Gobierno había expresado inicialmente su rechazo.

Casi una decena de parlamentarios tomaron la palabra al finalizar los discursos del portavoz en el Congreso, Eduardo Zaplana, y del líder de los populares. En especial, destacaron las intervenciones de tres diputados vascos: Gustavo de Arístegui, José Eugenio Azpiroz y María Eugenia Martín Mendizábal.

De Arístegui, portavoz de Exteriores del PP en el Congreso, criticó la "política errática" que el Gobierno había desarrollado hasta la reunión entre Zapatero y Rajoy. Al mismo tiempo, recordó que la soberanía reside conjuntamente sobre el conjunto de los españoles, sin que las partes puedan renunciar a ella.

Denunció que, si la soberanía no fue conjunta, lo planteado por Juan José Ibarretxe en su proyecto soberanista podría llevar al "absurdo" de que cualquier pueblo de España proclamara su independencia unilateralmente e incluso que cada ciudadano hiciera lo mismo y dejara de ser español por decisión propia.

ALERTA SOBRE EL "PLAN LOPEZ"

Por su parte, Martín Mendizábal arremetió contra el "plan Ibarretxe" y contra la propuesta alternativa presentada por el candidato del Partido Socialista de Euskadi, Patxi López, y que ha sido redactada por Emilio Guevara. En su opinión, ambos están fuera de la Constitución.

Sin embargo, Martín Mendizábal alertó de que podría darse la situación de que los vascos interpreten el "plan Guevara" como el término medio, puesto que se sitúa entre la reivindicación soberanista del PNV y el rechazo del PP a reformar el Estatuto de Guernica.

Las intervenciones de José Eugenio Azpiroz y del diputado gallego Julio Padilla fueron mucho más "entusiastas", según las fuentes consultadas por Servimedia, ya que se centraron en felicitar a Rajoy por el acuerdo alcanzado con Zapatero.

El diputado leonés Juan Morano, que durante la guerra de Iraq criticó abiertamente el apoyo del PP a Estados Unidos, respaldó en esta ocasión a la dirección nacional, si bien abrió una reflexión sobre las ventajas e inconvenientes de admitir a trámite el "plan Ibarretxe" en la Mesa del Congreso para que se debata posteriormente en el Pleno.

Rajoy adujo en este caso que la Cámara Baja no debería admitir el proyecto del "lehendakari" dada su inconstitucionalidad y resaltó, como luego reiteró en rueda de prensa, que eso supondría un "mal precedente" en el Congreso para rechazar otro tipo de cuestiones en un futuro.

Durante el discurso, Rajoy también apostó por modificar la legislación vigente para que las reformas estatutarias requieran una mayoría parlamentaria de dos tercios de la Cámara si quieren ser aprobadas.

Todo el Grupo Parlamentario Popular apoyó esta iniciativa, que ya estaba incluida en la propuesta de acuerdo que Rajoy entregó a Zapatero en La Moncloa, y coincidieron en resaltar que eso evitaría reformas unilaterales como la que, según esta formación, plantea Ibarretxe.