Uno de los arrestados empleaba documentación falsa para desplazarse a Madrid, donde se abastecía de la droga. La banda disponía de un domicilio en el que iban a poner en marcha un laboratorio para adulterar los estupefacientes ante el inicio de la temporada estival. En la actualidad tenían preparadas 4.500 dosis de "cristal" para su distribución.

La operación ha sido realizada por agentes del Grupo de Respuesta Especial al Crimen Organizado (GRECO) de las Islas Baleares, junto con agentes del Grupo de Estupefacientes de la Comisaría de Ibiza, en colaboración con la Agencia Tributaria.

La investigación comenzó a finales del año 2007, al tener conocimiento la Policía de que un individuo realizaba frecuentes viajes a Madrid, donde, al parecer, se abastecía de sustancias estupefacientes. Los agentes pudieron verificar que en sus desplazamientos empleaba documentación falsa para dificultar la labor policial.

Una vez tenía la droga en su poder, regresaba a la isla en avión y la empaquetaba de manera que no pudiera ser detectada en el aeropuerto.

DETENCIONES Y REGISTROS

Tras localizar a los cuatro integrantes del grupo, se procedió a su detención y al registro de sus domicilios. En uno de los pisos los agentes localizaron los envoltorios que empleaban para camuflar la droga en los viajes.

En otro de los domicilios se intervinieron 4.500 dosis de "cristal", 270 gramos de clorhidrato de cocaína y 370 gramos de marihuana envasada al vacío y preparada para su distribución.

Asimismo, los investigadores localizaron una tercera vivienda propiedad de los investigados, que figuraba como alquilada a una tercera persona que nada tenía que ver con el grupo.

Sin embargo, se comprobó que ellos mismos habían formalizado un contrato de alquiler, para lo que emplearon un DNI que había sido extraviado, con el objeto de que no se les pudiera relacionar.

En el interior de esta vivienda estaban realizando los preparativos para poner en funcionamiento una "cocina" donde tenían previsto adulterar el estupefaciente, para lo que disponían de prensas hidráulicas y de diversos productos químicos.

También se han intervenido pasaportes griegos y españoles, así como permisos de conducir de varios países, todos ellos falsos, puños americanos y varias armas blancas, entre otros efectos.