El detenido, que acudió a la estació de servicio al parecer en estado ebrio, entró en la tienda de la gasolinera y pidió fiadas dos botellas de whisky, pero el propietario, que conocía al muchacho y a su familia, se negó.

El joven salió enfurecido del establecimiento y subió en su coche, un "Renault-12", con el que intentó arrollar a uno de los empleados. Finalmente, estrelló el turismo contra el local, en cuya puerta y escaparate quedó empotrado.

Los trabajadores de la gasolinera avisaron a la policía y hasta el lugar de los hecho acudió un coche patrulla, cuya dotación detuvo al joven, a pesar de su violenta resistencia. Angel I.V., que carece de antecedentes, no tiene carnet de conducir, dada su edad.

Por otra parte, la policía encontró anoche el cuerpo sin vida de Felipe Gómez Pérez, de 38 años, en la tienda de comestibles de su propiedad situada en la calle Zaida, 16, en el distrito madrileño de Carabanchel.

El cadáver estaba tendido entre unas estanterías, semioculto con algunas ropas y otros objetos. Presentaba trauatismos en la cabeza que, según un primer examen, le habían ocasionado una fractura craneal.

La policía no ha encontrado el arma homicida e ignora el móvil del crimen, aunque la hipótesis más probable es que sea el robo. Las investigaciones corren a cargo del Grupo de Homicidios de la Brigada de Policía Judicial.