Además, está presuntamente implicado en la receptación de objetos robados con los que sus compradores le pagaban la droga, según informó la Jefatura Superior de Policía.

La detención de Sepehri Aminen ocurrió en una pensión de la calle Marqués de Santa Ana. El iraquí almacenaba en su habitación decenas de tomavistas, cámaras fotográficas, aparatos de radio y otros objetos,además de diversos documentos de identidad y pasaportes.

También le fueron requisados 25 gramos de heroína, 100 de hachís, unos gramos de opio y numerosas cajas de psicotrópicos. Sepehri Aminen residía ilegalmente en España, aunque posee el estatus de refugiado político en Alemania.

Los agentes del Grupo de Investigación seguían la pista del iraquí desde hace tiempo, ya que estaba considerado como uno de los principales suministradores de droga del distrito.