Según informó la Policía, las pesquisas permitieron averiguar que desde un domicilio de Bilbao se estaban descargando y compartiendo vídeos de carácter pedófilo.

El análisis de la información aportada por el proveedor de servicios de Internet permitió geolocalizar la vivienda e identificar al titular del servicio. Tras una serie de vigilancias y seguimientos, los agentes lograron confirmar la identidad del usuario de la dirección de IP desde la que se hacían las descargas.

El pasado 11 de octubre, previa autorización judicial, los agentes practicaron una entrada y registro en la vivienda del sospechoso, ubicada en la capital vizcaína.

'HANTAI PEDÓFILO'

Durante esta diligencia, los investigadores procedieron a la detención del sospechoso, un hombre de 58 años, y a la intervención de un disco duro, una tableta y varios dispositivos periféricos de almacenamiento externo (memorias USB, tarjeta SD y micro SD).

En un primer análisis del material pornográfico contenido en estos dispositivos electrónicos, se localizaron numerosos vídeos y fotografías de dibujos animados pornográficos japoneses de menores. Eran del género de ficción nipona conocido como ‘Hentai pedófilo’, lo que en sí mismo se considera un delito de corrupción de menores.

Esto es así porque, según el Código Penal, la mera representación visual de una persona que parezca menor de edad en un contexto sexual es considerada como pornografía infantil. Además, los investigadores descubrieron que el detenido también alteraba estos dibujos animados ayudándose de la inteligencia artificial para sustituir las caras por las de menores reales.