Esa desviación fue un 92,8 por ciento superior a la del ejercicio anterior, en que la diferencia entre el gasto inicialmente aprobado y el finalmente ejecutado fue de 793.600 millones.

El incremento de gasto registrado como consecuencia de la aprobación de créditos extraordinarios votados en el Parlamento ascendió a 109.600 millones de pesetas, mientras que el resto se debió en sumayoría a ampliaciones de partidas presupuestarias previamente autorizadas.

De esas ampliaciones, la más cuantiosa, de 301.470 millones, respondió a la necesidad de hacer frente a pagos por intereses de la deuda por encima de lo previsto. El coste total de la financiación de la deuda se situó el año pasado en 1.835.500 millones.

Otros incrementos de gasto correspondieron a las mayores transferencias del Estado al Insalud, que reclamaron una ampliación de gasto de 154.521 millones; a Defensa, por23.466 millones; y a las corporaciones locales, por 33.566 millones.

Por otra parte, al finalizar el ejercicio de 1991, las obligaciones pendientes de pago ascendían a 1.452.700 millones de pesetas, lo que supuso un incremento del 31,6 por ciento respecto a 1990.