Según sus descubridores, esto demuestra que la obesidad es una herencia genética y que el deporte y el control alimenticio no son suficientes cuando el metabolismo almacena grasa sin control.

A juicio de los expertos, dirigidos por el doctor Craig Warden, este hallazgo supone que hay una molécula en muchos tejidos del cuerpo humano que permite a las célulasquemar energía deshaciendo la grasa que sobra, conviertiendo la energía extra en calor corporal.

Los científicos creen que este gen, bautizado como UCP2, genera una proteína que activa la quema de calorías acabando con la grasa que se acumula depués de una comida. "Este gen determina si se queman las calorías extras y se convierten en calor o si se almacenan en el organismo en forma de grasa", explicó el doctor Warden.

Este descubrimiento aumenta las esperanzas de que una pastilla pueda regular l obesidad en un futuro no muy lejano. En opinión del doctor Warden, se necesitarán dos años para encontrar la medicina que contenga la proteína generada por este gen y otros tres años de ensayos en humanos para que la pastilla pueda estar al alcance de las personas con problemas de peso.