"Hoy, ante la emergente epidemia de gripe de origen porcino y los casos de afectados que ya están apareciendo en nuestra región, se pone de manifiesto lo inadecuado y temerario de aquella decisión política que eliminó un servicio público esencial", afirma Defensa de la Sanidad Pública, que pide la dimisión de los responsables de la desaparición de estos servicios.

Y es que, denuncia la citada agrupación, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y el consejero de Sanidad, Juan josé Güemes, "tan críticos usualmente con las actuaciones ministeriales, ahora callan y, ante la falta de herramientas en salud pública regional que ellos mismos han provocado, delegan todas las decisiones referentes a esta emergencia sanitaria en el por su parte habitualmente denostado Ministerio de Sanidad".

A juicio de la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Madrid, las únicasinstrucciones recibidas por los profesionales de la sanidad pública madrileña procedentes de la Consejería "son notas simples y generalidades" que les derivan a páginas y departamentos de instituciones ministeriales o de la Organización Mundial de la Salud (OMS).