El objetivo del acuerdo es obener una mayor eficacia en la gestión de los recursos humanos y materiales que ambos departamentos destinan a esos fines.

Diversas disposiciones del ordenamiento interno español facultan a la Armada para prestar auxilio en alta mar y realizar tareas de remolque y extracciones marítimas.

Por su parte, el Ejército del Aire, a través de los centros y unidades del Servicio de Búsqueda y Salvamento (SAR), es el encargado de la localización y rescate de las tripulaciones de aeronaves accidentadas.

Respecto a la Dirección General de la Marina Mercante, es la responsable de la seguridad de la navegación y de las vidas humanas en el mar, así como de la lucha contra la contaminación marina.

El convenio permite al SAR requerir la ayuda del Centro Nacional de Coordinación de Salvamento y Lucha contra la Contaminación en caso de accidente aéreo en zona marítima.

Asimismo, contempla la elaboración de planes específicos para la formación y adiestramiento del personasl que participa en estas tareas.