La investigación de este robo ha recaído en la titular del juzgado de instrucción número 17 de Sevilla, Pilar Llorente, encargada también del caso Ollero.

Juan Ignacio Zoido consideró "lamentable y desgraciado" este incidente que pone de manifiesto "la falta de seguridad del edificio de los juzgados de Sevilla".

El decano de los juees de Sevilla declaró que "vamos a tomar las medidas oportunas para que esto no vuelva a ocurrir en un futuro y espero que se pueda averiguar quién ha sido la persona que ha cometido este robo".

"Estamos en una situación de riesgo, dijo, que es difícil de evitar puesto que no podemos olvidar que son miles de personas las que a diario entran en el edificio de los juzgados y es muy difícil poner un vigilante detrás de cada una de ellas para controlarlas".

Juan Ignacio Zoido aseguró que en "en el jugado número 9 de lo penal donde se produjo el robo no se dispone, al igual que en el resto, de cajas fuertes o de seguridad".

El juez decano de Sevilla argumentó que "estas cajas fuertes pueden evitar que documentos o pruebas importantes queden al acecho de cualquier persona".

Por ello el magistrado sevillano precisó que "insistiré de nuevo en la solicitud de cajas de seguridad para todos los juzgados de Sevilla".

El acceso de personas a las dependencias y despachos de los jueces y fiscales e Sevilla no requiere ningún tipo de control, según el decanato.

Las medidas de seguridad en la actualidad en el edificio de los juzgados de Sevilla se limitan únicamente al funcionamiento de un scanner en la puerta de entrada a la vigilancia de varios miembros de la guardia civil.