DEBATE NACION. AZNAR HABLA DE LUCHA CONTRA MONOPOLIO Y GONZALEZ DE ABUSO DE PODER EN TV DIGITAL Y FUTBOL

- El presidnte insistió en que "los hechos" son que Hacienda dejó de ingresar 220.000 millones

MADRID
SERVIMEDIA

José María Aznar y Felipe González centraron hoy su duelo parlamentario en el contencioso por las leyes de TV digital y de retransmisiones deportivas, más conocida como "ley del fútbol". Lo que para Aznar son "intereses económicos", para el líder de la oposición es "abuso de poder".

Ambos líderes dejaron estratégicamente la última parte de cada réplica y contrarréplica a esa cuesión y evidenciaron que es el tema que más separa en este momento a populares y socialistas.

Aznar reprochó a González que confunda "los intereses generales de los españoles y la libertad con las cuentas corrientes" del Grupo Prisa, al que no citó. El presidente recordó que los socialistas ya utilizaron las libertades para atacar a Adolfo Suárez y posteriormente a Leopoldo Calvo Sotelo en tiempos de UCD.

"No es de recibo decir que las libertades en España van bien, según las cuentas corrientes subn o bajen", dijo. Lo que está en juego, a juicio del presidente, es si los españoles van a poder ver más partidos en abierto o no.

El líder del PSOE replicó que si se trata de una "subasta" para ver quién defiende la emisión de más partidos en abierto, él está dispuesto a entrar en ese "populismo". "Si usted propone 10, yo digo 20", afirmó González, "si dice 30, yo 60, y si dice 60, yo diré 180". Pero afirmó no estar dipuesto a que la financiación recaiga finalmente en los ciudadanos, porque es "de setido común" que las indemnizaciones a Audiovisual Sport, por la pérdida de derechos de emisión, las pagará el Estado y no Vía Digital.

En opinión del presidente del Gobierno, vincular las libertades a los intereses de un grupo de comunicación sí que es "demagogia", porque "aquí lo que hay que decir", afirmó, "es si se está por el monopolio o por la competitividad".

NO SE RETRACTA

Aznar no aceptó el reto de Felipe González de retractarse en la acusación de que el anterior gobierno "amnistió" fisalmente a 600 contribuyentes y Hacienda dejó de ingresar 220.000 millones de pesetas.

"Los hechos son bastante determinantes", contestó el jefe del Ejecutivo, que habló de nuevo del "perjuicio" causado a la Hacienda Pública.

No obstante, matizó que eso no supone una acusación personal al anterior ministro de Economía, Pedro Solbes, defendido por González en su primera intervención. "Aquí no se trata de atacar la honradez y la honorabilidad de nadie", dijo en referencia a que el Gobierno sólo estáexponiendo los "hechos" para que se juzguen políticamente, no penalmente.

El presidente y su antecesor en el cargo también mantuvieron una fuerte discusión en materia judicial. Aznar recordó el "exceso" de González al llamar "descerebrados" a algunos jueces y mencionó a Baltasar Garzón recordando que fue en las listas del PSOE. El líder socialista replicó que Garzón "no se ha dado por aludido".

Felipe González explicó que cargó contra aquellos jueces que se extralimitan en sus funciones y advirti que no está dispuesto a "demonizar al Ejecutivo", ni siquiera al de Aznar, como hacen algunos magistrados en conferencias.

"No me parece que el Ejecutivo sea la suma de todos los males y el Poder Judicial la garantía de todos los bienes", señaló González, a lo que conestó Aznar reiterándole su petición de que respete a la Justicia.

PROBLEMAS "HISPANO-ESPAÑOLES" EN BRUSELAS

El presidente también pidió a González que no convierta "en poder independiente" a los fiscales, porque no lo son, en alusón a la oposición mayoritaria de la carrera al nombramiento de Eduardo Fungairiño como fiscal jefe de la Audiencia Nacional. Previamente, González le había dicho a Aznar que no son ningún "coro".

Por último, ambos mandatarios mantuvieron una dura polémica respecto a dos cuestiones económicas: el Pacto de Toledo y el cupo vasco. Aznar pidió a González que el PSOE no ponga en peligro el Pacto de Toledo y éste le contestó que si el Ejecutivo acepta las enmiendas socialistas para garantizar en el año 2015el cobro de pensiones públicas, el PSOE no pondrá ninguna pega.

Respecto al cupo vasco, el presidente reprochó al líder socialista que el PSOE no tenga una posición común, una el PSE y otra los dirigentes socialistas nacionales, y emplazó a González a que diga qué va a votar el Grupo Socialista. El líder socialista se negó a someterse a este "examen".

En su lugar, el ex presidente pronosticó que se van a multiplicar ante las instituciones comunitarias en Bruselas los problemas creados con el Régien Especial Fiscal para Canarias, porque con la capacidad normativa se van a crear desigualdades fiscales y las autoridades comunitarias van a tener 17 problemas "hispano-españoles".

En cuanto a la acusación de González de que lo único que ha conseguido este Gobierno con su política hacia Cuba es que los otros países europeos tengan embajador y España no, Aznar replicó que él quiere "lo mismo" para la isla caribeña que para España: libertad y democracia.

(SERVIMEDIA)
11 Jun 1997
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