Esta fundación, dedicada a la ayuda a los enfermos de sida y a informar gratuitamente sobre el síndrome de inunodeficiencia adquirida, ha recibido numerosas llamadas telefónicas en el último mes que solicitaron información sobre el fallo del reactivo y en los centros en los que se ha utilizado.

Héctor Anabitarte, secretario general de FASE, ha recomendado a todos los que se hayan hecho la prueba del VIH desde el pasado mes de noviembre que se pongan en contacto con el centro sanitario al que acudieron y aclaren si en sus pruebas se usó el reactivo de Abbot.

"Hemos recibido algunas llamadas angustiosas d personas que dieron negativo en las pruebas, siguieron una vida normal y este descubrimiento les ha causado nuevamente la zozobra de saber que han podido estar infectados. Es volver a pasar por una situación de mucho estrés", señaló Anabitarte.

El responsable de la Fundación Antisida de España calificó de "meritorio" que haya sido el propio laboratorio Abbot quien haya alertado sobre el fallo de su reactivo, al tiempo que consideró que los laboratorios "trabajan con cuidado" y "un error así le puede asar igual a los que fabrican coches o aviones".