CUMBRE LISBOA. AZNAR Y BLAIR QUIEREN IMPONER REFORMAS LABORALES CONCRETAS Y FIJAR UN CALENDARIO PARA LOGRAR EL PLENO EMPLEO
- España rechaza que se imponga un crecimiento económico del 3% para todos los países miembros
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
Los máximos responsables de los gobiernos español y británico, José María Aznar y Tony Blair, respectivamente, preenden imponer en la Cumbre Extraordinaria de Empleo que se celebra esta semana en Lisboa unas reformas laborales concretas para todos los países de la Unión Europea (UE), con el fin de alcanzar así el objetivo del pleno empleo en el año 2010, según informaron hoy fuentes de la delegación española que viajará a la capital portuguesa.
Además de la carta remitida por Blair y Aznar al resto de países de la UE, en la que hacen unas propuestas genéricas, la pretensión de ambos ejecutivos es impulsar medidasconcretas, con un calendario de cumplimiento que sería revisado a principios de cada año en las cumbres ordinarias.
Sobre el alcance de las medidas, el Gobierno español intentará convencer a sus socios comunitarios de las bondades del modelo español de diálogo social, que ha dado buenos resultados en el mercado laboral durante los últimos años.
En cuanto a las medidas concretas, existe un documento firmado por los gobiernos británico e italiano en el que se apuntan reformas como recortar el diner destinado a las políticas pasivas de empleo (paro) e insistir en las activas (formación y talleres).
Según las mismas fuentes, la idea del Gobierno español y del resto de países también está en la línea de impulsar las políticas activas, aunque nadie precisa si esto conllevará un recorte en la cobertura por desempleo.
No obstante, todos los gobiernos comunitarios están preocupados por la baja natalidad y el envejecimiento de la población, lo que pone en riesgo los actuales sistemas de protecciónsocial. España pedirá a los expertos de la UE un informe detallado sobre este asunto y se impulsarán medidas en el sentido de prolongar la edad de jubilación.
Además, se podrían estudiar sistemas de pensiones y prestaciones alternativos a los actuales, como los fondos de pensiones. De hecho, una de las pretensiones de la UE es liberalizar el movimiento de fondos y favorecer el intercambio de derechos de pensión de los trabajadores entre todos los países comunitarios.
La delegación española que vijará a Lisboa tiene claro que de esta cumbre debe salir una línea política de actuación en materia de empleo que englobe, además de las actuaciones políticas, el diálogo social.
CRECIMIENTO 3%
Según las mismas fuentes, algunos países de la UE encabezados por Francia proponen que de Lisboa surja la obligación para todos los países de la UE de mantener un crecimiento económico del 3% como única manera para que crezca también el empleo.
España, que no tiene problemas para crecer incluso por encimadel 3%, no está de acuerdo con esta propuesta porque cree que algunos países pueden hacer un esfuerzo de crecimiento y, por el contrario, descuidar el cumplimiento de los pactos de estabilidad que, a juicio de la delegación española, son más importantes e ineludibles.
Por ello, pedirán que no se establezcan estas cifras rotundas y sí que se pueda aconsejar a los países de la UE sobre los crecimientos idóneos para mantener el ritmo de creación de empleo.
Finalmente, España intentará acelerar la lieralización de todos los mercados europeos, sobre todo en los sectores de comunicaciones y transporte aéreo, en lo que cuenta con la oposición, entre otros países, de Francia.
La delegación española insistirá también en una rebaja sustancial de las ayudas públicas a determinados sectores productivos, que atentan contra la libre competencia en los mercados.
(SERVIMEDIA)
21 Mar 2000
C