En un comunicado, esta corriente del PSOE destacó la contribución del Papa "a la visibilización de un cristianismo comprometido con la defensa de la dignidad humana en tiempos de globalización".

"Agradecemos su testimonio de dolor y de lucha en la enfermedad", continuó, y su fallecimiento "lo vivimos en la esperanza y la utopía de que la muerte no es la última palabra sobre la vida del ser humano".

"Recordamos en él como legado su posicionamiento profético contra la guerra: 'Nunca más la guerra', su apuesta por la solidaridad entre los pueblos, la prioridad de la persona respecto al capital y el coraje para pedir el perdón por los errores e infidelidades de la Iglesia al Evangelio", dicen los socialistas cristianos.

La corriente cristiana del PSOE recuerda unos versos de San Juan de la Cruz, personaje sobre el que Juan Pablo II hizo su tesis doctoral, que dicen: "Mi alma se ha empleado/ y todo mi caudal, en su servicio;/ ya no guardo ganado/ ni ya tengo otro oficio,/ que ya sólo en amar es mi ejercicio".