Asimismo, el militar pregunta al ministro dónde están las evaluaciones e informes técnicos que recomendaron la "sospechosa" adquisición de unos aparatos "de inferiores características a otros del mercado (como el F-15, F-16 o Mirage 2000) y que ya la marina norteamericana advirtió antes de su compra de la alta siniestralidad que registraban".

En su escrito, Amadeo Martínez Ingés, que además de coronel del Ejército es responsable de Estudios y Programas de la Presidencia Federal de Izquierda Unida, plantea seis preguntas sobre compras y adquisiciones del departamento de García Vargas desde que era responsable el ahora vicepresidente del Gobierno, Narcis Serra.

TRAFICO DE INFLUENCIAS

Según Martínez Inglés, en la compra de material militar "es muy normal pagar comisiones del 3 ó 4 por ciento", por lo que consideró que "existe un tufillo de corrupción y tráfico de influencia" en las sucesivas adquisiciones de los F-18A.

En una de las cuestiones de su escrito, que firma como responsable de IU, pregunta al ministro si se pagaron con fondos oficiales las cuatrocientas mil pesetas que costaba el alquiler de un chalé en la lujosa urbanización El Viso, de Madrid, alquilado como residencia "alternativa" del anterior ministro de Defensa, Narcis Serra, y después de que éste cediera su pabellón oficial a un íntimo colaborador.

El coronel Martínez Inglés también se refiere en a carta a otros posibles casos de tráfico de influencias, como la adquisición por veinticinco millones de un cuadro del pintor y amigo de Serra Antoni Tàpies para decorar la zona noble del ministerio, así como si el ahora vicepresidente del Gobierno pagó algún canon no reglamentario por la supuesta compra de los dos pianos de cola "para solaz personal y divertimento melománico del señor Serra".

De los setenta y dos F-18 adquiridos por el Gobierno español, dos se han estrellado desde que el Ejército emezó a recibir los aviones el 10 de julio de 1986. El primero cayó a tierra en las cercanías de Zaragoza en noviembre de 1988 y el segundo en las Bardenas Reales (Navarra) en noviembre de 1990. Ambos llevaban en servicio poco más de un año.