Escribano y el medio centenar de empleados despedidos desde que se iniciaran las movilizaciones, en marzo, se concentraron a mediodía en la explanada de entrada al Museo del Prado, donde desplegaron dos mesas portátiles de ruleta y "black jack".

La concentración se prolongó por espacio de una hora y durante este tiempo no fue necesaria la intrvención de las cuatro furgonetas de Policía que vigilaron el desarrollo del acto.

Los trabajadores repartieron pasquines reivindicativos a los viandantes y periodistas, y simularon jugar partidas en las mesas ante la mirada curiosa de los turistas que accedían al museo.

Amador Escribano y el secretario de Acción Sindical de CCOO de Madrid, Antonio Ruda, explicaron a los informadores cómo algunos de los afectados por las amenazas anónimas han tenido que instalar grabadoras en sus teléfonos para tatar de identificar a los autores de las llamadas.

"Llaman", dijo Antonio Ruda, "y le dicen a la mujer de algún compañero: tu marido es un `hijo puta' y lo vamos a matar".

Escribano y Ruda manifestaron que todavía no se ha desbloquedo la negociación colectiva, interrumpida desde la última reunión del comité con la empresa, celebrada el pasado 16 de junio.

HUELGA DEL 15 AL 18 DE AGOSTO

Los trabajadores del Casino Gran Madrid han venido convocando posteriormente huelgas intermitentes con el bjetivo de presionar a la empresa para que firme el convenio colectivo de este año. Los próximos paros se llevarán a cabo entre el 15 y el 18 de agosto y el 28 de agosto y el 8 de septiembre.

Además, los 52 despedidos permanecen día y noche, desde hace un mes, acampados frente a las instalaciones del casino Gran Madrid, en Torrelodones.

Según comentó Escribano, los 900 trabajadores que forman la plantilla no pueden aceptar el 11 por ciento de subida salarial que ofrece la patronal, porque esa subda es "falsa".

El presidente del comité de empresa explicó que, tradicionalmente, el casino paga a los empleados con el denominado "tronco de propinas", que el año pasado ascendió a 2.618 millones de pesetas.

La principal reivindicación de la plantilla es que ese tronco se divida a partir de ahora al 50 por ciento en dos capítulos independientes: uno para la empresa y el resto para gastos de personal, Seguridad Social y atención a clientes.

Por contra, el 11 por ciento de subida salarial queofrece la empresa, señaló Escribano, se pagaría con el actual sistema de "tronco de propinas" unitario que sigue el Casino Gran Madrid, "con lo cual", matizó, "la subida real es cero, porque todo lo que se nos suba de salario base se sacará de esa `bolsa única' y se nos quitará de los complementos que también se pagan de ahí".

MENTIRAS

El presidente del comité de empresa acusó al Casino Gran Madrid de mentir descaradamente en la publicidad insertada en varios periódicos nacionales el pasado viernes. En esa información se aseguraba que los empleados del casino ganan cantidades que oscilan entre las 200.000 pesetas mensuales, el llamado croupier de entrada, y 700.000 pesetas, un inspector de primera.

"Nunca se ha llegado a esas cantidades. Ahora mismo, rondan las 120.000 ó 130.000 pesetas netas, el salario de los que entran de la escuela. Lo que pasa es que la empresa ha incluido el IRPF y luego las ha exagerado".