En 2000, la industria española de la construcción alcanzó una producción de 14,6 billones de pesetas, con un aumento del 6,5% respecto al año anterior. Estos datos muestran una ligera ralentización de esta actividad en los dos últimos años, ya que en 1999 creció a un ritmo del 8,5%.

Las previsiones de Seopán para este añ apuntan a que la actividad constructora tendrá una clara tendencia deceleradora en la edificación residencial, y tendrá una tendencia más estable en la edificación no residencial. Sin embargo, habrá un repunte de la rehabilitación de edificios y la obra civil.

En concreto, la patronal estima que la construcción de edificios residenciales crecerá entre el 2% y el 4% (9,5% en 2000), la edificación no residencial entre un 4% y un 6% (6,5% en 2000), la rehabilitación de edificios entre el 4% y el 5% (2,5 en 2000) y la obra civil entre un 9% y un 11% (7% el año pasado).

Según los responsables de Seopán, estas estimaciones han sido elaboradas manteniendo una previsión del precio del barril de crudo en 25 dólares y el tipo de cambio en 0,9 dólares por euro.