Los miembros del Gobierno, presidentes autonómicos, altas institucones del Estado, diputados y senadores asistentes aplaudieron durante más de un minuto el discurso del Rey Juan Carlos, en el que aseguró que nadie puede adueñarse de la Carta Magna como algo propio pero tampoco rechazarla como ajena. Los portavoces del PNV en el Congreso y el Senado apenas secundaron la ovación.

Los Reyes llegaron a las Cortes poco antes de las doce del mediodía precedidos del Escuadrón de Lanceros de la Guardia Real. Allí les esperaba el presidente del Gobierno, José María Aznar, y os presidentes del Congreso y el Senado, Luisa Fernanda Rudi y Juan José Lucas, respectivamente. La puerta principal de la Cámara Baja se abrió en esta ocasión, como sólo se hace en momentos excepcionales, para recibir a la Familia Real.

En su entrada al hemiciclo de la Cámara Baja, fueron recibidos con una sonora ovación, que acabó interrumpida por el himno nacional. Los Reyes ocuparon los escaños correspondientes a la Presidencia del Congreso. A su izquierda quedaron el Príncipe de Asturias y de lasInfantas Elena y Cristina. A su derecha, Rudi y Lucas.

Los esposos de las Infantas, Jaime de Marichalar e Iñaki Urdangarín, y la prometida de Felipe de Borbón, la periodista Letizia Ortiz, tenían reservados tres asientos en la tribuna del Congreso.

En los bancos azules del hemiciclo aguardaban el presidente del Gobierno, José María Aznar, y todos los miembros de su gabinete. Sólo quedó vacío el escaño correspondiente a la ministra de Asuntos Exteriores, Ana Palacio, en viaje de trabajo.

SUAREZGONZALEZ, AUSENTES

Los asientos de los diputados se transformaron esta vez por unos bancos alargados y acolchados para que todos los senadores y diputados cupieran en la sala. No obstante, las últimas filas estaban prácticamente vacías. No acudieron todos los parlamentarios.

Las principales ausencias fueron las del ex presidente del Gobierno, Felipe González, y las de los diputados de Esquerra Republicana de Cataluña, el Bloque Nacionalista Galego, Eusko Alkartasuna e Iniciativa per Cataluña. Esos partidos ya habían anunciado su ausencia en señal de disconformidad.

También hubo notables faltas entre los presidentes autonómicos. Ni el "lehendakari", Juan José Ibarretxe, ni el presidente en funciones de la Generalitat catalana, Jordi Pujol, acudieron al más importante de los actos de homenaje a la Constitución española en su 25 aniversario. El resto de los presidentes de comunidades autónomas estuvieron todos. También el presidente de la ciudad autónoma de Melilla, Juan José Imbroda.

La tibuna tenía un gran espacio reservado para quienes en 1978 debatieron y redactaron la Carta Magna. De los siete, faltó Jordi Solé i Turá por motivos de salud. Tanto Miquel Roca como Gregorio Peces Barba, Miguel Herrero de Miñón, Manuel Fraga, José Pedro Pérez-Llorca y Gabriel Cisneros siguieron la celebración como principales protagonistas que son. Cisneros lo hizo desde su escaño habitual, ya que es el único que sigue siendo diputado 25 años después.

Junto a los ponentes constitucionales estaban sentdos algunos de los presidentes que han tenido el Congreso y el Senado en la historia de la democracia, como Juan Ignacio Barrero, Félix Pons, Fernando Alvarez de Miranda y Landelino Lavilla, y el ex presidente del Gobierno Leopoldo Calvo Sotelo. No estuvo, en cambio, Adolfo Suárez.

Entre los asistentes podía verse a altos cargos del Estado como el presidente del Tribunal Constitucional, Manuel Jiménez de Parga; el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Francisco Hernndo; el fiscal general del Estado, Jesús Cardenal; el presidente del Consejo de Estado, José Manuel Romay Beccaría; y el defensor del Pueblo, Enrique Múgica.

También estuvieron el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Javier Ansuátegui; la vicepresidenta de la Comisión Europea, Loyola de Palacio; el comisario europeo de Economía, Pedro Solbes; el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón; el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales, José María Cuevas; el secretario eneral de la Unión General de Trabajadores, Cándido Méndez; el ex alcalde de la capital José María Alvarez del Manzano; el presidente de la Conferencia Episcopal y arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela; y el nuncio de Su Santidad el Papa en España, Manuel Montero de Castro, entre otros.

EL PNV APENAS APLAUDE

Tanto unos como otros rindieron una gran ovación al Rey nada más terminar su discurso. Juan Carlos I y Doña Sofía permanecieron en pié durante más de un minuto agradeciendo las muestra de agradecimiento y de cariño de todas las personalidades presentes.

Pasado ese tiempo, mientras continuaban los aplausos, hicieron un gesto de despedida y salieron del hemiciclo por la puerta principal, cerrada durante todo el año y que se abre sólamente en ocasiones excepcionales como esta.

Resaltó la actitud de los portavoces del Partido Nacionalista Vasco en el Congreso y en el Senado, Iñaki Anasagasti y Joseba Zubía, que apenas aplaudieron al Rey cuando concluyó la lectura del discurso con otivo del 25 aniversario de la Constitución.

En un primer momento, Zubía se sumó a la ovación sin reparos mientras que Anasagasti daba dos palmas, primero, y un poco después, otras tres. No hubo más. El portavoz peneuvista en el Senado se percató de la actitud de su compañero y ambos permanecieron de pie, pero sin dar palmas, durante el más de un minuto de ovación a la Familia Real.

A la izquierda de Anasagasti estaba el portavoz de CiU en el Congreso, Xavier Trías, que no paró de aplaudir y que ncluso intercambió sonrisas y comentarios con su compañero del Partido Nacionalista Vasco.

A la derecha se habían sentado otros portavoces parlamentarios del Congreso y el Senado que, como el coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, que, con más o menos entusiasmo, se sumaron a la ovación y apladieron hasta que los Reyes salieron del hemiciclo.

Al finalizar la sesión, los Reyes contemplaron en la puerta principal de la Cámara Baja, que también se abrió por primera vez este año cn motivo de la celebración del 25 aniversario de la Carta Magna, un desfile de la Agrupación de las Fuerzas Armadas en honor de Sus Majestades.