Las mujereschinas pueden ser multadas, detenidas y condenadas a trabajos forzados por mantener relaciones fuera del matrimonio, ser amantes de varios hombres, lesbianas o ser causantes de la ruptura del matrimonio de un soldado.

Esta tipificación de "delitos sexuales" para las mujeres chinas provoca que entre el diez y el quince por ciento de las presas se encuentren en la cárcel por esta causa.

Además, una encuesta oficial de las autoridades penitenciarias chinas indican, según los datos de AI, que el 90 pr ciento de las presas menores de edad cumplen penas por estos "delitos sexuales".

Las reclusas chinas representan aproximadamente el 2 por ciento del 1,3 millones de personas que cumplen penas en las cárceles del país que acoge la IV Conferencia de la Mujer.

Sin embargo, las autoridades no incluyen en esta estadística las más de 30.000 prostitutas sometidas a "reeducación", las que cumplen penas para rehabilitarse de las drogas y las presas de conciencia.

Las reclusas peor tratadas en Chinason las políticas, según los últimos informes de Amnistía Internacional, y en algunos casos son encarceladas únicamente por ser esposas de otros presos políticos o por manifestarse en zonas conflictivas, como ha ocurrido con varias monjas tibetanas.