En un comunicado, Confemetal apoya la propuesta realizada el pasado mes de noviembre por la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), que, además de la congelación de la presión fiscal para las pymes, propone otras medidas de carácter fiscal, administrativo y laboral.

Tanto Cepyme como Confemetal aseguran que esta propuesta, que ha tomado como referencia el plan elaborado por el Gobierno rancés para mejorar la competitividad de las pymes galas, es necesaria para aumentar la competitividad de las pymes españolas y afrontar favorablemente el reto del mercado único de 1993.

La propuesta de Cepyme pide también que el Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) asuma un porcentaje de las indemnizaciones que tienen que dar las pymes por despido de trabajadores y la extinción del contrato por causas objetivas a las pequeñas y medianas empresas.

Asimismo, exige el restablecimiento de la transparncia fiscal voluntaria en las pymes, para evitar la doble imposición de dividendos, la reducción de IRPF y del Impuesto de Sociedades en relación con los beneficios reinvertidos, la deducción en este último impuesto por aumentos de capital en las empresas y la regulación del contrato de aprendizaje.

Otras medidas propuestas por Cepyme para mejorar la competitividad de las pequeñas y medianas empresas españolas es la puesta en marcha de incentivos fiscales para la transformación de empresas individuale en societarias y la simplificación administrativa, la información y la asistencia técnica para facilitar el cumplimiento de las cargas administrativas y burocráticas.

Para Confemetal, todas estas medidas "no son originales ni exorbitantes" y son necesarias para cubrir las deficiencias de la legislación existente y para reducir el esfuerzo y las dificultades que entraña el mercado único para las pymes españolas, teniendo en cuenta que representan más de tres cuartas partes del PIB.

En opinión de os responsables de esta patronal, "no se trata sólo de pedir ayudas o subvenciones en muchos casos sin objetivos claros a los que destinarlos, sino de crear un clima que haga factible salir a competir fuera o quedarse en el mercado doméstico en las mismas o similares condiciones que las de nuestros socios comunitarios".