Los ucranianos utilizaban para el transporte deltabaco un avión que pertenecía al Ministerio del Defensa de la República de Ucrania, que había sido alquilado a la compañía "BSL Airlines" para su utilización como avión de mercancías.

Además del vuelo en el que fueron aprehendidas 887.992 cajetillas de tabaco de las marcas "Wiston" y "Marlboro", los contrabandistas habían realizado ya otros diez, en los que se transportó tabaco con un precio estimado de 3.134 millones de pesetas, lo que supone un fraude de 2.222 millones por el impago del impuesto esecial del tabaco.

El juez impuso penas de 3 años de prisión para seis de los contrabandistas y dos años para los dos restantes. A todos ellos les imputa un delito continuado de contrabando y a dos de ellos les añade la utilización de documentos oficiales falsos.

Les impone a todos una multa, que recaudará el Estado español, por importe de la deuda tributaria defraudada (más de dos mil millones de pesetas) y, ante la imposibilidad de éstos de hacer frente a la deuda nombra responsable civil subsidraria a la entidad "BSL Airlines", absolviendo a la República de Ucrania.

SISTEMA DE CONTRABANDO

Los ucranianos recogían el tabaco en el puerto franco de Rotterdam (Holanda) y lo transportaban en camiones a Ostende (Bélgica), amparando el cargamento con documento aduanero "en tránsito".

De allí, lo transportaban en avión a Belgrado, fuera de la Unión Europea, donde forraban las cajetillas con contrachapado de madera en el que se ponía el nuevo destino, que eran las ciudades griegas Salónica o Aenas, dentro ya de los paises comunitarios. Desde allí se dirigían a Vitoria y decían que transportaban material eléctrico (sin aranceles), con lo que ya estaban en situación de poder distribuir el tabaco por todos los países europeos.