En declaraciones a Servimedia, Carbonel expresó su "sentimiento entremezclado de tristeza por la pérdida y de alegría por haber tenido con nosotros un Papa extraordinario, ejemplo de coherencia, que ha plasmado en una doctrina muy abundante, y porque ha dejado de sufrir la agonía que estaba pasando".

"Siempre ha estado al lado de la verdad, la justicia y la paz", agregó, "y ha sido un ejemplo de respeto a la persona", porque se ha mostrado como un "ejemplo vivo" por encima de su enfermedad.

Carbonel destacó asimismo la contribución del Santo Padre a la derrota de regímenes totalitarios. "Fue decisivo en la caída del Muro de Berlín" y en el cese de los totalitarismos "más sanguinarios de la historia".

Concluyó que fue "una persona alegre, que transmitía muchísimo afecto. Era un gran comunicador", y una persona que defendió "con claridad, sin titubeos y sin avergonzarse" los valores de la familia, el matrimonio como unión del hombre y la mujer, la libertad y el derecho a elegir una educación católica.