Las siete actuaciones supondrán la construcción de 87,5 nuevos kilómetros de vías, en cuyo diseño se invertirán más de 5,5 millones de euros y que "estará listo en poco más de 5 meses". Entre las carreteras afectadas destacan la M-100, entre la Radial 2 y la M-111, así como la M-404, entre la M-600 y la M-407, que, según la Comunidad, "permitirán descongestionar el Sureste y el Noreste de la región, creando importantes ejes de comunicación".

La primera de ellas supondrá la duplicación de 15 kilómetros de vía para dar continuidad al tramo sobre el que ya se está trabajando en Alcalá de Henares y que permitirá descongestionar en gran parte la A-2 e incluso la A-1. Se prevé destinar a esta obra una inversión cercana a los 80 millones de euros.

En cuanto a la ampliación de la M-404, la Comunidad de Madrid trabajará en un tramo de alrededor de 20 kilómetros que se incluirá dentro del proyecto Redsur.

Junto a ellas se prevé también la duplicación de la M-104, entre el tramo A-1 y M-607; la carretera M-206, entre Torrejón de Ardoz y Loeches; la M-208, entre Velilla de San Antonio a la M-300, cerca de Alcalá de Henares; la M-505 antes de llegar a Galapagar; y la M-600, entre la M-503 y la A-5.

Según el Gobierno regional, "todas estas carreteras prevén un tráfico superior a los 15.000 vehículos diarios una vez estén finalizados y en algunos casos, como la M- 505, incluso se prevé doblar tal previsión, llegando a 30.000 vehículos al día".