Flynn aseguró que abandona su cargo con la satisfacción de haber cumplido uno de sus principales objetivos: situar la política sobre empleo entre las principales prioridades de la Unión Europea.

En su opinión, la estrategia europea para el empleo ha supuesto una renovación tant en términos de regulación como de medios para hacer frente a los problemas del mercado laboral.

Añadió que el plan comunitario para el empleo "ha situado el desarrollo continuado de unas normas sociales mínimas en el contexto de una mayor adaptabilidad y productividad".