Según manifestaron fuentes de la Confederación a Servimedia, los peces del pantano conquense, en su mayoría carpas, no serán trasladados a otros embalses, sino que serán sacrificados y poseriormente enterrados con cal.

Estas mismas fuentes afirmaron que los trabajos permitirán extraer diariamente entre 200 y 300 kilos de carpas, que al final de los trabajos podrían suponer la muerte de unos 24.00 kilos de peces.

La Confederación del Júcar se vio obligada el verano pasado a trasladar miles de peces desde el pantano de Alarcón al de Mequinenza (Zaragoza), por la mortandad que provocó el rápido desembalse del pantano conquense para abastecer a la Comunidad Valenciana. Esta acción motvó que el Gobierno de Castilla-La Mancha abriera un expediente sancionador a la Confederación del Júcar, que finalmente fue multada por el Ejecutivo autónomo que preside José Bono.

La pasada semana la Comisión Permanente de la Sequía de la Confederación del Júcar consiguió aprobar, con la autorización del Gobierno de Castilla-La Mancha, la extracción de peces del embalse de Alarcón.