Estos datos indican que, para fabricar un abrigo de visón, es necesario matar a 60 animales, si es de piel de zorro a 20, en el caso de las focas 7 y en el de las nutrias y linces también 20.

Los ecologistas mantienen que España, a pesar de registrar inviernos más suaves que muchos países europeos y americanos, es el tercero en consumo de abrigos de visón por habitantes, después de EEUU e Italia.

Asimismo, aseguran que en nuestr país la caza de animales por su piel provocó la extinción de la garduña de Ibiza y estuvo a punto de acabar con todas la poblaciones de nutria y lince ibérico.

La Coda también denuncia el trato que reciben los animales salvajes que utiliza la industria peletera para fabricar los abrigos y cita entre los métodos utilizados para matarlos el gaseado con monóxido o dióxido de carbono, la dislocación del cuello, la inyección de pentabarbital sódico y la electrocución, "hasta el desangrado".

La coordiadora ecologistas expone diez razones para solicitar a los ciudadanos que no utilicen este tipo de prendas, entre las que destacan, además de las citadas, la manipulación genética a la que son sometidos los animales, el riesgo de introducción de especies no autóctonas en el medio natural y la producción de residuos que generan estas industrias.

Finalmente, argumenta que existen prendas alternativas, fundamentalmente las realizadas con fibras naturales, cuya producción no entraña daño alguno para las epecies animales.